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El próximo domingo se elegirá a la nueva Miss Universo, y esta edición del certamen de belleza más importante del mundo parece estar rompiendo antiguos esquemas, pues no solamente está concursando por primera vez una mujer transgénero, la representante de España, sino que varias de las candidatas ya no tienen aquellas mal llamadas “medidas perfectas”, y esperan hacer historia.

Tal es el caso de la delegada de Dinamarca, Helena Heuser, una mujer espectacular que rompe

(Bloomberg) — Unos 400 días después de la desaparición de Mohammed Al Amoudi, llegó el jueves la noticia de su paradero: se encuentra bajo custodia en Arabia Saudita y a la espera de juicio por cargos de corrupción y soborno.

La buena noticia para Al Amoudi, uno de los hombres más ricos del mundo, es que durante su prolongada ausencia, gran parte de su imperio empresarial global ha prosperado. Las ventas de su refinería petrolera con sede en Suecia, Preem AB, aumentaron más del 30 por ciento y sus propiedades corporativas en Estocolmo aumentaron de valor.

Desde que fue capturado por las fuerzas de seguridad en Riad el año pasado como parte de una iniciativa radical del príncipe heredero Mohammed bin Salman, su patrimonio neto ha aumentado en un 6 por ciento, ascendiendo a US$8.300 millones, según el índice de multimillonarios de Bloomberg, un ranking de las 500 personas más ricas del mundo.

Un funcionario saudí que pidió no ser identificado confirmó el jueves que el multimillonario está vivo y bajo custodia, aunque no se ha fijado una fecha de juicio. Al Amoudi ha estado en contacto con familiares y se dice que tiene buena salud, según su portavoz, Tim Pendry. Él negó que Al Amoudi haya sido acusado oficialmente de cualquier delito y declinó hacer más comentarios.

Al Amoudi, cuya fortuna se remonta a un contrato con el gobierno saudí durante el reinado del rey Fahd, ha acumulado US$7.600 millones de activos fuera del Reino y posee empresas que emplean a miles de personas en Europa y África. Pero, como lo demuestran los eventos del año pasado, su primer benefactor, la familia real saudí, todavía tiene influencia.

La preciosa europea, quien es una modelo famosa en su país, es dueña de un rostro de muñeca, pero se ha negado a bajar de peso y lucir como la mayoría de sus compañeras, asegurando que está muy conforme con su figura.

Incluso hace unos meses, la guapa reina posó para el fotógrafo Jan Teller, en unas imágenes en las que lució con mucho orgullo algunos de los pliegues alrededor de su abdomen y sus piernas gruesas, como una manera de enviar un mensaje de amor a las figuras propias.

“Esta soy yo”, dijo la reina en la serie de fotografías que ella misma compartió en sus redes sociales y que le valieron elogios de la mayoría de cibernautas y una que otra crítica de aquellos que todavía se rigen por parámetros de belleza únicos y que no dudan en atacarla y decirle que está “gorda” para ser Miss Universo.

el prototipo de belleza estilizada y ultra delgada, y quien con unas libritas de más, defiende la figura de la mayoría de las mujeres del común.

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